Casa de Manuel y Valentín Magallanes
El libro llamado “Crónica de La Serena” que fuera publicado en su primera edición por la imprenta “La Reforma” en 1871, ahora es re-editado por la Sociedad de Creación y Acciones Literarias de la Región de Coquimbo (SALC). Este libro contiene una biobibliografía muy completa en torno a Manuel Concha Gajardo, realizada durante varios meses, consultando a fuentes diversas en el país, por la historiadora y académica, Susana Pacheco Tirado. Este estudio viene a demostrar la vida ejemplar y notable del hijo predilecto de la ciudad de La Serena, Manuel Concha. También tendrá este libro un estudio sociológico y contextualizado de la época de Julián González Reyes, lo que viene a hacer una importante revelación de las características patrimoniales de la Región de Coquimbo y, especialmente de la segunda ciudad más antigua de Chile. Además, esta nueva edición es reparadora fundamentalmente del verdadero aporte de Manuel Concha; pero, también, es un homenaje al “Sitio de La Serena” y a la “Revolución Constituyente”.
Esta edición de “Crónica La Serena” trae en su portada una fotografía de la casa del poeta Valentín Magallanes en la calle O´Higgins de La Serena, donde viviera el Premio Nacional de Literatura, don Manuel Magallanes Moure, y que en la solapa del libro viene señalado en manuscrito por el mismo Magallanes Moure.
Este proyecto de rescate patrimonial fue dirigido por el poeta Arturo Volantines y un equipo de la SALC compuesto por: Catherine Trigo, Natalia González Oróstigue y Miriam Marín Díaz. El motivo fundamental de la publicación es señalado por Arturo Volantines: “Esta edición de “Crónica de La Serena” es tributo a los 160 años del “Sitio de La Serena (1851)” y a los 150 años de la “Revolución Constituyente (1859)”, hechos fundantes en donde los hijos de Atacama y Coquimbo buscaron justicia, libertad y descentralización. Particularmente, es un homenaje al oficial constituyente, periodista, dramaturgo y escritor, Manuel Concha Gajardo, quien no sólo escribió este libro, sino varios, todos notables, incluido el “diario de la revolución” (El Cosmopolita). Tiene biobibliografía contextualizada, investigada por Susana Pacheco Tirado; contiene introducción epocal y comparada de Julián González Reyes. Se actualizó la ortografía, se corrigió algunas erratas de la primera edición (1871), y se incorporó aportes lingüísticos de la edición de la U. de Chile (1979). El énfasis es reparador de la vida y obra de Manuel Concha, injustamente acotada y desconocida. El énfasis, también, está en la luminosidad de la obra; busca que la obra hable desde la obra, porque posee del ser de la segunda ciudad de Chile (1544) y de la nobleza de su gente: constructora de tradición heroica y libertaria, indomable. No se sorprenda: éste no es un libro, es semilla.”.
Algunos de los capítulos de esta obra son: Fundación de La Serena: Poder concedido a don Francisco de Aguirre por don Pedro de Valdivia para reedificar La Serena, Fundación de la ciudad de San Bartolomé de La Serena, Sello real, Piratas, La Portada, Acta del incendio de La Serena, Pulperías de su Majestad, Fiestas religiosas, Cédula real, La Vega, La Pampa, Descripción topográfica, Plaza y plazuelas, Reloj público, Publicaciones periódicas, Periódicos publicados en La Serena, Salida del mar. Pánico, La Catedral, Las dos ermitas más antiguas, Intendencia, Fundación del Liceo de La Serena, Hospital de San Juan de Dios, Toma de Valdivia, Muerte de Pico, Caída de O´Higgins y la Constitución de 1823, Sucesos políticos del año 1829, etc.
Para cualificar la importancia de la vida y obra de Manuel Concha y de la publicación de este libro, la investigadora Susana Pacheco Tirado rescató, entre otros documentos, la publicación en el diario El Progreso de 1891, donde Francisco Sainz de la Peña señala en las honras fúnebres: “Señores: no vengo a hacer el elogio de Manuel Concha; no lo necesita, pues tiene sobradas prendas naturales para agregarle adornos postizos, cosa que casi siempre sucede al borde de las tumbas, donde como lo expresa tan espiritualmente Lord Byron, se dice de los muertos lo que debieron ser y no lo que fueron. Como periodista y como literato, Manuel Concha es bien conocido, no sólo en La Serena que lo vio nacer, sino en toda la República y en América; siendo, además, sus trabajos literarios, reproducidos en varias publicaciones extranjeras. En política, siempre perteneció a las ideas liberales que le habían convencido de corazón y de entendimiento. Hay un hecho raro en su vida, y es que un hombre del talento de Manuel Concha, nunca haya obtenido ningún destino público, como lo han obtenido otros de menos valor que él; pero es un hecho que se explica fácilmente porque los destinos son de quien los solicita, y Concha, con su carácter modesto, pero honrado e independiente, no se amoldaba al adulo ni a esperar en las antesalas. Fue pobre en bienes de fortuna; pero rico en talento y dotes literarias; y si alguno de estos potentados de la riqueza, en su fatuidad osó mirarlo a veces con desdén, ellos pronto serán envueltos en el polvo del olvido, en tanto que el nombre de Manuel Concha vivirá en sus obras eternamente dentro y fuera del pueblo que le vio nacer”.